Aburrida de buscar

Kanto, luego de haber descendido de la gran torre, a pesar de notar que Kaye le seguía, si dispuso a entrar al inmenso castillo de las noches, pero un reiatsu que se elevaba más y más en las afueras del castillo llamó poderosamente su atención haciendo que su vista, y posteriormente sus pasos veloces se dirigieran hacia allí.

Luego de un pequeño tramo y un par de sonidos, el quinto espada ya se encontraba en aquella zona, muy cerca de aquel reiatsu, divisando a la distancia una hermosa chica sentada, si... se trataba de su fracción como se había percatado... ¿pero que hacía allí sola elevando su reiatsu de aquella manera?.

¿Acaso estás llamando a alguien con eso?...-Dijo la voz del Kanto (ya en su forma humana), con sus labios a solo unos milímetros del oido de Adeliyana, puesto que se había acercado de un sonido sin que se percatace.

Kanto no pude evitar sonreir al ver el susto que se pegó su subordinada ante sus palabras y su cara al verle tan de cerca. Los ojos dorados del arrancar permanecían fijos en los de su fracción, con la pequeña sonrisa en sus labios y sus manos detrás de su cintura sin moverse de su posición.

Si pequeña... lo he sentido...-Susurró ladeando su cabeza-¿Me necesitabas?, ¿querías decírme algo? ¿que te de un paseo? ¿que te cuente un cuento?.... o solo esperabas a ver si funcionaba... ¬¬ -Dijo con tono irónico poniendo un rostro algo más serio aunque aquello le parecía cómico por dentro.

Su sonrisa se amplió levemente al escuchar que no era pequeña, ante lo cual colocó una mano en su cabeza y le hizo una caricia como si se tratase una ves más de una niña pequeña.
De todos modos, al escuchar el resto de sus palabras no pudo evitar extrañarse un momento... todas esas cosas?, quería que le diera un paseo, tenia que decirle algo, quería que le leyera un cuento y lo necesitaba? ._. sin duda eran muchas cosas...

Vaya... si emmmm... ¿todo eso? ._. -Dijo quedándose viéndole un momento con su rostro ladeado-Pues bueno ya estoy aquí, y aprovecha que hoy estoy de buen humor, si tienes algo que decirme aprovecha... y te llevaré a dar un paseo entonces...-Dijo suavemente, era raro verle apacible de aquella forma pero era uno de esos días en los que se encontraba de buen humor, sin demasiadas ganas de matar a alguien ni nada por el estilo.

Adeliyana se acercó y le dio un abrazo a su superior luego de unos segundos se separó algo asustada y empezó a decir una serie de cosas que no se entendían, pero lo que si se entendía era lo siguiente- Pues quiero que juguemos a contestar preguntas, pero primero léeme un cuento si?- Luego de unos segundos su mirada se puso fría y continuó diciendo- Que el cuento sea de sangre y muerte si?

La arrancar esperó que su superior le respondiera, quería hacer todo lo que podía para mantenerlo cerca de el por lo menos un poco de tiempo, no quería que se fuera, pero sabía que al ser solo su fracción el se iría con los más fuertes a divertirse.

Los ojos de Kanto se abrieron grandes al tiempo que levantaba una ceja al sentir el abrazo de Adel, quedándose éste inmóvil, moviendo sus orejas en señal de confusión.
Kanto se quedó viendo a los ojos de su hermosa fracción un instante, hablaba tan apresurada que apenas se le entendía lo que decía, pero al parecer quería realmente que el espada le contace un cuento.

No creí que fuese enserio-Dijo dejando caer sus párpados hasta la mitad de sus ojos mirando raro a su fracción pero finalmente se encogió de hombros y bostezó sonriéndole una vez más.

Ummmm veamos... no es que acostumbre hacer estas cosas...-agregó frotando su nuca y sentándose junto a su fracción-No quieres mejor que te de un paseo y te lleve a un sitio más vistoso mientras jugamos a contestar preguntas como dices?-dijo finalmente puesto que no se le ocurría nada y tampoco es que fuese demasiado bueno en esas cosas, más que contar cuentos de sangre y muerte... sabía escribirlos con sus propias manos.

El rostro de Kanto se tornó levemente sombrío por un momento al sentir como su subordinada desaparecía de un sonido y le picaba desde atrás con una rama, al parecer había cambiado oootra ves de idea, ahora quería jugar a las escondidas. Una pequeña vena se marcó en la frente de Kanto que entrecerró sus ojos suspirando al escuchar el resto de sus palabras.

Dios veo que no te decides...-Susurró desapareciendo completamente de un sonido, apareciendo detrás de Adel y susurrándole al oido-Te has ganado una sesión de entrenamiento-Agregó soplándole suavemente en la oreja para luego tomar la zampakutoh de su fracción y desenvainarla, quitándosela y luego empujándole hacia adelante suavemente con una mano.

Tu primera misión es recuperarla...-Sonrió alejándose un par de pasos y mostrándole su katana a Adel, esperando a que viniera por ella.

Finalmente, luego de quitarle la espada y ver la expresión en su rostro, una sonrisa juguetona se marcó en el rostro del espada, al fin estaba comenzando a liberar su verdadera forma de ser, la cual le gustaba sinceramente. Aquella expresión asesina, aquella mirada penetrante.

Kanto escuchó las palabras de Adel sin moverse de su posición, viendo como lanzaba aquel ataque hacia su mano, sin embargo, el espada no se movió ni un centímetro de su posición, esperando hasta el último segundo, y fue cuando su fracción desapareció de un sonido, apareciendo a su lado tratando de encestarle una patada, que el 5º se desvaneció en un rápido sonido, haciendo que la espada de Adel se encontrara con el aire.

Kanto apareció entonces a la distancia, incado sobre una roca, con sus dorados ojos fijos en la fracción y aquella sonrisa pícara permanente ya en sus labios.

Y así quieres recuperarla?... vaaamos Adel se que puedes hacer algo mejor-Sonrió como si la estuviese retando a que mostrara más poder.

Como planeaba Kanto, Adeliyana se ponía cada ves más seria, lo cual hacía que su sed de batalla también aumentara, pero todo estaría bien mientras no se transformara en lobo, eso podría hacer que se volviera un tanto salvaje como había sucedido antes con Kaye.

Kanto vió como comenzaba a correr a gran velocidad en círculos a su alrededor, comenzándo a lanzarle cero tras cero sin parar. Ante lo cual el espada tranquilamente, elevó su reitasu, cerrando sus ojos y colocando la espada de Adel en su boca para sostenerla.
Luego de hacer esto, al acercarse a gran velocidad el primer cero, Kanto desenvainó ambas katanas y con una velocidad y fuerza considerable comenzó a golpear cero tras cero con sus zampakutoh's cortándolos, dividiéndolos y desviándolos, evitando que toquen su cuerpo en lo absoluto.

Una gran nube de humo se había levantado con los consecuentes ataques, cuando los ceros se convirtieron entonces en balas, sin duda era una estrategia bastante astuta pero que haría gastar bastante reiatsu a su fracción.
Al ser las balas más rápidas, Kanto no pudo golpera con su katana todas ellas, por lo que la mayoría de ellas golpearon su cuerpo, provocando quemaduras y rasgando sus ropas en diversas zonas, algo un poco doloroso sí, pero nada de gravedad, además de que el espada estaba acostumbrado al dolor.

Cuando las balas dejaron de golpearle, pudo sentir entonces como el reiatsu de Adel se movía rápidamente lanzándose dentro de la nube de humo, ante lo cual Kanto guardó rápidamente ambas katanas, y cuando la hermosa fracción estuvo casi por alcanzarle, el espada giró rápidamente, abrazándole por detrás y dándole un pequeño beso en el cuello por las espaldas.
En aquel abrazo Kanto había inmovilizado los brazos de su fracción por delante con su misma zampakutoh, manteniéndola pegada a su cuerpo sin la aparente opción de moverse.
Una ves disipada la nube de humo se pudieron ver las diversas marcas y quemaduras en el cuerpo de Kanto en el cual sus ropas estaban rasgadas.

Kanto pudo notar el rubor en las mejillas de su fracción al sentir aquel beso, mientras notaba como trataba de safarse, pero la posición y los brazos de Kanto envolviéndole no le permitían moverse en lo más mínimo.

El arrancar sonrió ante las palabras de Adel, sin duda le gustaba cuando estaba con aquella actitud de superioridad y desprecio, no podía evitarlo, lo cierto era que su fracción le atraía en cierto grado.
Me lo ordenas?... déjame recordarte que... no tienes tu zampakutoh en tus manos-Susurró para acercar sus labios a los oidos de la arrancar como había hecho antes-Como piensas liberar tu resurrección?-Agregó dándole un nuevo beso debajo de su oreja y apoyando su rostro luego contra el de la fracción.

No podía evitarlo, el estar tan cerca de Adel hacía que aquel juego y entrenamiento se convirtiera poco a poco en una simple excusa para estar un poco más cerca suyo.
Podía sentir casi su respiración y su dulce aroma al tener su rostro tan cerca del suyo, mientras mantenía su cuerpo inmovilizado para que no pudiese safarse.
Kanto escuchó las palabras de la bella fracción levantando una ceja, al notar como ésta acercaba más sus labios a los suyos, ¿que era lo que tenía en mente?... sinceramente no le preocupaba demasiado. Los labios de Adel se rozaron lentamente con los de Kanto de forma insitante, lo cual hizo que el espada no se percatara en lo absoluto de la acumulación de reiatsu en la mano de la arrancar, sin embargo, en un pequeño impulso y dejándose llevar por lo que el momento le incitaba, Kanto sonrió levemente dejando sus ojos fijos en los de Adel.

Dime... ¿que harás?-Susurró sobre sus labios para luego acercarse más, posando sus labios sobre los de su fracción y besándole dulce y prolongadamente, entrecerrando sus ojos y aflojando sus brazos, la fracción estaba libre de liberarse ahora... si es que así lo deseaba.

Notó como Adel correspondió su beso, lo cual en cierto grado le alivió por dentro, puesto que no pensaba alejarse de allí por ahora. Por lo que Kanto prolongó más y más el beso, acariciando dulcemente los labios de Adel con los suyos, sintiendo su dulzura y su humedad, concentrándose y perdiéndose tanto en aquel beso que dejó caer la zampakutoh de su fracción de sus manos, para entonces girarle comletamente y poner sus manos en sus brazos, acariciándolos dulcemente.

Aquello ya no era una simple distracción, era un beso real e intenso y Kanto no pensaba detenerlo por el momento.